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ENTREVISTA - Sternberg Kohen Arquitectos

“Los múltiples cambios en el paradigma hacen que continuamente surjan nuevos productos arquitectónicos”

El arquitecto Mariano Kohen, del estudio Sternberg Kohen Arquitectos, relata su visión sobre la actualidad de la construcción en la Argentina y los proyectos en los que trabaja su estudio

Mariano Kohen es, junto con Adriana Sternberg, creador del estudio Sternberg Kohen Arquitectos, que desde el año 2000 desarrolla diversos proyectos de arquitectura, dirección de obra y construcción.

El estudio ha proyectado y construido edificios de diversa índole: casas, viviendas multifamiliares, hoteles, oficinas, locales comerciales, entre otros. “Entendemos que la diversidad de proyectos nos ha permitido explorar distintas temáticas y problemáticas dentro de la profesión, lo que la hace mucho más rica, pero también nos ha dado un ejercicio muy interesante para la resolución de problemas y una visión menos encasillada sobre cada proyecto en particular”, explica Mariano Kohen.

El equipo se encuentra, desde hace algunos años, trabajando por un lado con proyectos para clientes, y por otro con desarrollos propios. “Nuestra idea es poder seguir creciendo en ambos, incorporando proyectos de mayor escala y complejidad”, cuenta el arquitecto. Actualmente se encuentran construyendo tres edificios de vivienda, en distintos barrios de la Ciudad de Buenos Aires. El primero de ellos es el segundo edificio de Innova, la marca que el estudio desarrolla para edificios entre medianeras

Mariano Kohen cita como referentes a los arquitectos Antonio Bonet, Luis Barragán, Alvar Aalto y Renzo Piano, y considera que los arquitectos aun tienen mucho para avanzar en cuenta a la apreciación de su trabajo en la actualidad. “Se ha avanzado mucho en la concientización de la importancia del diseño, tanto en productos inmobiliarios como de otra índole, sin embargo, todavía estamos en deuda respecto a la valoración como profesionales que tenemos por parte de los demás”, opina.

El arquitecto tiene una visión optimista de la actualidad del mercado de la arquitectura y la construcción en la Argentina, porque, si bien la actualidad está marcada por la incertidumbre, tanto desde lo económico como de lo político, y el mercado de la arquitectura no se encuentra fuera de esa lógica, aun sigue siendo una muy buena inversión y en los momentos donde las ventas no acompañan demasiado, la preservación de valor se convierte en una ventaja con la cual muy pocos productos alternativos pueden competir. Además, agrega que “los múltiples cambios en el paradigma, tanto en la manera de vivir como de trabajar, educarse, entretenerse, hacen que continuamente surjan nuevos productos arquitectónicos y por lo tanto nuevas oportunidades de inversión y trabajo para clientes”.

En cuanto a la influencia de la personalidad de cliente en la opinión del arquitecto, Mariano Kohen explica que, cuando uno trabaja para clientes, tanto su opinión como sus costumbres, manera de vivir, relacionarse, habitar o trabajar son muy importantes, pero deben ser consideradas como herramientas para la concreción del proyecto arquitectónico. “Sin embargo, la calidad del proyecto y de la obra son una responsabilidad profesional y creo que ahí uno debe poner el límite. El edificio trasciende a quien lo habita circunstancialmente y debe permanecer, seguramente, por mucho tiempo más y ser habitado por otros usuarios, y tenemos una responsabilidad con ellos también”, aclara.

El arquitecto dice que la arquitectura ha tenido que adaptarse al proceso de cambios que la tecnología conlleva. Destaca la importancia de mantenerse atentos a este permanente proceso, poder ofrecer productos que incorporen todos estos cambios y que sean útiles por mucho tiempo porque, de otro modo, los edificios  quedarán rápidamente obsoletos.

Por último, con respecto a las características del espacio ideal, Mariano Kohen cuenta que entiende a la arquitectura como una armonía entre distintas virtudes. “Lo más importante es como todas estas características interactúan y ahí, en su combinación, está la clave para que los espacios luzcan, funcionen”, expone.