Noticias Informe Construya N° 364 - Agosto 2023 Indicadores en retracción, pero lejos de una parálisis Lic. Pablo A. Lara Director de ESTRATECO ConsultoresEn junio el conjunto de los indicadores sectoriales volvió a mostrar caídas, tanto con relación a mayo como con respecto a junio de 2022. A ello se sumó una nueva retracción del Índice Construya en julio. En tanto, al profundizar el análisis se observa una disminución de los despachos de insumos, mientras a nivel de las obras continúa el proceso de sustitución a favor de las construcciones medianas y grandes, y en detrimento del gasto en refacciones que había sido motorizado por la pandemia, y al mirar hacia adelante también sigue disminuyendo la superficie autorizada para construir obras privadas. Pero, cuando se colocan estos indicadores en una perspectiva histórica se observa que la actividad de la cadena de valor de la construcción está todavía muy lejos de la parálisis.El Indicador Sintético de Actividad de la Construcción (ISAC) registró una baja de 1,5% mensual desestacionalizada, que se sumó a la retracción de mayo, y en la comparación interanual se ubicó 2,8% abajo. Con estos guarismos, en el primer semestre de 2023 la entrega al mercado interno del conjunto de los insumos relevados fue 2,1% menor a la de enero-junio de 2022.En el caso del Índice Construya (IC), en julio la baja mensual fue de 1,97% desestacionalizada y en la comparación interanual la contracción llegó a 13,2%. Respecto de esta última, es importante destacar que en julio de 2022 los despachos del grupo habían llegado a marcar un récord histórico, cuando crecía la incertidumbre sobre el futuro por los cambios que se sucedieron en el ministerio de economía y los actores de la cadena buscaban proteger su capital de trabajo. Al comparar los despachos de los primeros siete meses de 2023 con los de igual período de 2022, la contracción fue de 9,3%. Entre los insumos que integran el ISAC, entre mayo y junio sólo subieron los envíos al mercado de asfalto (+21,4% corregido por estacionalidad), partiendo de niveles muy bajos. El calendario electoral puede haberlos dinamizado, pero cuando se colocan en una perspectiva más extensa se observa con precisión que los despachos de asfalto son muy inferiores a los registrados en 2017-2018. En los restantes grupos de insumos hubo levísimas subas y contracciones leves e importantes. Ordenadas de mayor a menor, las variaciones desestacionalizadas entre mayo y junio fueron: hormigón elaborado (+0,5%), agregado ‘vidrio plano para construcción, tubos sin costura y grifería’ (+0,4%), ladrillos huecos (+0,3%), cemento Portland (+0,1%), pinturas para construcción (-0,7%), artículos sanitarios de cerámica (-2,2%), cales (-2,4%), pisos y revestimientos cerámicos (-3,5%), hierro redondo y acero para construcción (-4,6%), mosaicos graníticos y calcáreos (-6,5%), placas de yeso (-7,8%), y yeso (-11,6%). En lo que respecta al cemento Portland, en el párrafo anterior se destacó el estancamiento de las entregas totales entre mayo y junio, producto del sostenimiento de las mismas en torno al millón setenta/ochenta mil toneladas mensuales, a lo cual cabe agregar la contracción de 2,1% interanual. Pero lo más importante está en la desagregación por tipo de envase, ya que permite inferir que las obras nuevas medianas y grandes continúan recuperándose, al tiempo que el gasto en refacciones y pequeñas reformas sigue perdiendo participación, luego del fuerte impulso que les había dado la pandemia. En junio se enviaron al mercado 583,3 mil toneladas de cemento en bolsa, es decir 7,2% menos que un año atrás. En cambio, las entregas a granel sumaron casi 500 mil toneladas y fueron 3,9% mayores a las de junio de 2022, llegando a representar 46,1% del total. En tanto, al comparar los volúmenes de la primera mitad del año pasado y del corriente año surge algo muy parecido. Los despachos de bolsa cayeron 4,9% anual y los de cemento a granel crecieron 8,1% anual. La serie que mide el número de puestos de trabajo formales ocupados en la construcción viene mostrando un comportamiento similar al de los despachos de cemento a granel, reforzando la hipótesis. Con datos a mayo de 2023, el total de puestos formales contabilizados en el sector llegó a 444,6 mil, número que resultó 13,9% mayor al de doce meses atrás y 63,9% superior al piso que se alcanzó durante la ‘cuarentena’ de abril-agosto de 2020.Y el indicador adelantado de actividad (en promedio a dieciocho meses) nuevamente disminuyó en mayo (octava en diez meses). En total se autorizaron 1,067 millones de metros cuadrados en el quinto mes del año, es decir 14,3% menos que en mayo de 2022. Con estos guarismos, en el período enero-mayo del corriente año se aprobaron 5,59 millones de metros cuadrados, 9,0% menos que en igual lapso del año pasado.